Después de la fotografía, Fred Ritch

Ensayo

El paradigma de lo análogo se encuentra al filo de su agonía, dando bocanadas de aire por algunos entusiastas y melancólicos que no permiten que perezca del todo, los procesos de revelado y baños químicos se han remplazado por medios más accesibles ha sucedido una transición de lo análogo a lo digital en un corto periodo de tiempo y aunque la fotografía digital precede de la análoga mantienen una relación distante.

En sus inicios la fotografía tenía la cualidad de representar la “realidad” y así atribuirle credibilidad a un hecho, sin embargo desde entonces se ha usado como un objeto para la manipulación del espectador con fines políticos o de cualquier otra índole,  actualmente con la era de lo digital se ha vuelto mecánica y maleable lo cual permite crear realidades alternas, como la fotografía de las patinadoras que aparecen juntas en la pista antes de que se realizara el espectáculo como un hecho premonitorio, la fotografía ya no sólo se trata de ahondar en el pasado si no también como un viaje al futuro. Los medios de comunicación juegan un papel importante somos una generación consumista que se deja pervertir por la ola de imágenes manipuladas que nos presentan la visión idealizada de cómo debemos ser o vestir, ya no es más la realidad representada sino el reflejo de nuestros anhelos.

 La imagen digital anestesia un poco la realidad, la suaviza de manera romántica tanto que poco nos damos cuenta del deterioro real de nuestro entorno, la creación genérica y en masa de la misma universaliza y reduce a todo en objetos, se le asignan etiquetas para hacer de lo más simple su búsqueda, se usan palabras claves que permiten su clasificación muchas veces ambigua.

En el tercer capítulo Ritchin hace una reflexión sobre el turista mencionado por Sontag, la cual señalaba a la fotografía como “un recurso para dar fe de una experiencia” plantea la ventaja de las imágenes digitales que pueden ser modificadas mediante programas, el turista puede hacer el montaje colocándose frente a los lugares más emblemáticos de cada lugar incluso antes de estar ahí, ahorrándose la fatiga de buscar el mejor encuadre o abrumarse con la multitud, es una invitación a disfrutar más y entregarse por completo a la aventura.

Las nuevas tecnologías abren camino a un mundo de posibilidades la imagen digital que puede ser fácilmente manipulada permite añadir pixeles para rellenar lo que no salió bien, incluso hacer un híbrido con otras imágenes de el mismo lugar para crear una imagen cada vez más perfecta, ahora puede existir un dialogo entre espectador e imagen saber que hubo antes de lo que está ahora, subirla a un sitio de internet en donde miles de usuarios pueden verla y reproducirla, pero esa facilidad de consumo de imágenes tiene un doble juego porque sin duda también se le da un mal uso  lo cual vuelve más difícil saber qué imagen es o no verdadera.

La fotografía ya no se reduce a un rectángulo impreso en papel ya no es más la metáfora de la ventana o el espejo si no que se puede comparar con un mosaico virtual en el cual puedes pasar de una imagen a otra unida por un hipervínculo o hipertexto que nos ayuda a explorar mejor cada una, su situación social, cultural o política.

A lo largo de su libro Ritchin aborda el gran impacto que tiene la imagen digital dentro de la sociedad que escala desde lo más bajo hasta lo más alto de una estructura social, la publicidad nos bombardea con ideas absurdas de cosas inalcanzables con fines comerciales y de consumo, la política emplea los medios de comunicación para la manipulación de mazas, la imagen posee un papel protagónico,  sin embargo puede servir para una reflexión más profunda de lo que debemos creer y ser cautelosos frente a esta nueva era.